Cuando nos paseamos por el mundo esotérico, encontramos
cualquier cantidad de fenómenos espirituales, psíquicos, paranormales e
inexplicables desde el punto de vista científico.
Más de un estudioso de las ciencias, ya sea física, química,
biología, matemática, etc., han llegado a la conclusión de que una mano divina,
una luz enigmática o una energía más allá de nuestra comprensión, de una u otra
forma ha intervenido en la creación de ciertos acontecimientos, que el común de
las personas ha denominado milagros.
La historia nos trae a colación algunos personajes que por
alguna razón asoman la posibilidad de la creencia en “milagros”. Solo por
mencionar algunos tendríamos que mencionar a Aristóteles, Copérnico, Galileo, Einstein
y en el caso de Venezuela el Doctor José Gregorio Hernández, que aun después de
muerto sigue salvando vidas con sus milagros, así la iglesia católica no lo
quiera reconocer por razones que desconocemos.
Nos llama la atención lo relativo a las animas que aquí en
Venezuela son muchas: la de Taguapire (Francisca Duarte), Amalio Blanca, el ánima
de Marrero, el ánima de pica-pica, etc., pero nadie habla del anima del Doctor José
Gregorio, ni del anima de la madre María de San José. Puro misterio que no
logramos comprender.
Para entrar en la materia que nos ocupa, tendremos que
empezar por definir que es “un anima”. El Diccionario Enciclopédico Larousse lo
define de la siguiente manera: “alma de los difuntos, particularmente las que se
supone están en el purgatorio”. Preguntamos ¿Es que deberían estar en otra
parte?. La duda siempre pone el dedo sobre la llaga.
Desde esa óptica se infiere que es algo único del mundo
cristiano católico, porque no conocemos que algún protestante, musulmán o judío
rinda pleitesía, devoción o fervor religioso a alguna anima. Si existe les pido
disculpas. Comienza a aclararse el panorama (¿o a complicarse?).
En el purgatorio según los católicos se purgan las penas, los
errores cometidos en el plano terrenal, para después lograr la purificación y
alcanzar el cielo y estar en gracia con Dios. ¿Sera que los “milagros” que
llevan a cabo las animas los ayudara en el otro plano para su elevación
espiritual y alcanzar la gracia divina? Sin embargo surge una duda: ¿Todas las
almas benditas del purgatorio se les pueden llamar animas?.
¿Cómo se
podrían llamar las que no son benditas? No lo diga, por favor no maldiga,
además suponemos que van al infierno de los católicos. Todo son suposiciones en
base a una creencia religiosa. El dogma cristiano es fuerte.
El ánima de Marrero (José Vicente Marrero Palma), según nota
de Cyrano escrita en una red social el 08-01-2.013 dice que era un llanero que vivió
en la Zona de Santa Rosalía, población cercana a Caicara del Orinoco en el
estado Bolívar. Fue un hombre trabajador y muy bebedor.
Cuando murió sus amigos iban a su tumba a echarse unos palitos
o tragos alrededor o encima de su fosa, en el cementerio de Santa Rosalía.
Suponemos que bajo efectos del alcohol le pedían favores tales como: si me
consigues el caballo que me robaron te traigo una botella de ron. O quizás si
haces que mejore la cosecha en este año, te traeré una caja de cervezas de las
que tu tomabas.
Parece ser que las cosas se daban. Así comenzó a correrse la
voz del ánima milagrosa de Marrero. La gente comenzó a pedirle favores y por
supuesto a pagar las promesas que se le ofrecieron.
Su culto se extiende por Santa Rosalía, Maripa, Ciudad Bolívar,
Cuchivero, Caicara del Orinoco, las Mercedes del Llano, Chaguaramas, Guarataro,
Los Pijiguaos, la Urbana, la zona de guaniamo donde los mineros le tienen gran
devoción y en muchos pueblos y caseríos del estado Bolívar.
Dicen algunos de los que visitan su tumba, que le colocaron
un tubo de plástico con un pequeño embudo en la parte superior y este baja
hacia su urna. Por allí le vierten el aguardiente, el ron, las cervezas, el
wiskie (una forma muy original para que el ánima comparta con sus amigos).
Pero hay un detalle digno de mencionar, pues resulta que
algunas veces debido al exceso de licor, este rebosa la tumba y sale a flote. Así
llegan algunas vacas, toros, becerros, asiduos visitantes del camposanto y
comienzan a lamer el aguardiente y se embriagan a tal punto que pasan toda la
noche mugiendo alrededor de la tumba.
Cuando eso pasa dicen los vecinos del camposanto que Marrero está
agradecido, muy contento y hace mugir a las vacas.
Por supuesto como en toda ánima en cualquier rincón del país,
le colocan sobre su tumba: coronas, placas, diplomas, por favores concedidos.
Esto también se puede observar por ejemplo con el ánima de taguapire, la cual
hemos visitado 2 veces, a quien le hicieron una casita y las placas, coronas,
ofrendas, diplomas, tapizan prácticamente todas las paredes del lugar.
Por otra parte también refiere Claviel Marcano en la misma
red social el 28-8-2.013 que personas agradecidas por concesión de favores le
han llevado serenatas en persona de los cantantes de música llanera Reynaldo
Armas y Vitico Castillo. En verdad eso debe ser todo un espectáculo.
Sería interesante visitar la tumba del ánima de Marrero, lo
cual procurare hacer en mi próxima visita a Caicara del Orinoco pasare por Santa Rosalía y le llevare como
ofrenda una botella de aguardiente. Maferefun bogbo egun todos los días. No
olviden que el muerto pario al Santo.
1 comentario:
Gracias por tu aporte , el anima de marreo es muy poco conocía aquí en Venezuela , pero de verdad es muy milagrosa quizás es la fé que uno le tenga!marrero ayudado hasta con persona desaparecida
Publicar un comentario